A 10 meses del primer caso de COVID-19 y casi 7 meses de distanciamiento social en México, la pandemia global continúa imponiendo retos económicos significativos para las empresas.
Los efectos del Coronavirus en el comercio exterior
De acuerdo con especialistas como Agustín Carstens, gerente general del Banco de Pagos Internacionales (BIS) y exgobernador del Banco de México, la crisis económica durará más de lo previsto y, a pesar de las medidas aplicadas, habrá inevitables bancarrotas.
Para sumar a este pronóstico complicado, la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) estima que 500 mil MiPyMEs cayeron en insolvencia de pagos, además de que el Banco de México ya ha reportado que las instituciones de crédito y bancos han incrementado sus requisitos y restricciones a las PyMES.
En términos generales, especialistas pronostican que los efectos en el comercio internacional por el Coronavirus seguirán presentes en los siguientes años e, incluso, nuestra economía regresará a niveles previos de la pandemia hasta 2025.
Ante este panorama, las empresas requieren de soluciones para mejorar sus niveles de liquidez, así como de adoptar una estrategia de diversificación para navegar mejor la crisis e impulsar el crecimiento de sus negocios.
La Organización Mundial del Comercio (OMC) recientemente estimó que durante 2020 el intercambio global de mercancía tendrá un descenso de 9.2%, vaticinando un complicado momento para el comercio global.
Entre los riesgos que menciona es que, a pesar de que el comercio ha jugado un rol crítico en la respuesta de la pandemia y ayudado a que los países tengan acceso vital a alimentos y medicamentos, es posible que la situación compleja genera un estado proteccionismo.
Por el contrario, el director general adjunto de la organización, Yi Xiaozhun, insiste en que la cooperación internacional, manifestada también en el intercambio de mercancías a través de la exportación será uno de los principales aliados para la recuperación de la pandemia del Coronavirus.
El factoraje, una alternativa ante la crisis del COVID-19
Con esto como referencia, las empresas que ya cuentan con una cartera de clientes internacionales deben reforzar sus estrategias de comercio exterior y buscar alternativas que les permitan sostenerse en el comercio global mucho más prácticas que solo el financiamiento de créditos tradicionales.
En ese sentido, el director general en México de Drip Capital, Edmundo Montaño, recuerda que el descuento de facturas, también conocido como financiamiento de cuentas por cobrar y factoraje, será uno los recursos más eficientes para cubrir las necesidades de capital durante la pandemia e impulsar las actividades de exportación de las empresas, especialmente las PyMES.
“El financiamiento es un arma clave para librar la crisis. En esa línea, el factoraje mejorará tu liquidez sin dejar de vender a tus clientes en plazos a crédito (de entre 60 o hasta 90 días), y ayudándote a __recibir el pago de tus ventas en efectivo por adelantado__”, concluyó Montaño.